¿Por que invertir en SEO para posicionarse en Google?

Nadie puede dudar actualmente que vivimos en un mundo conectado. La importancia que tiene la presencia en internet para una empresa cada vez es mayor. El posicionamiento SEO se encarga de hacer visible esta presencia en la web, colocando una página en la posición más alta posible de los resultados que Google ofrece al usuario tras una búsqueda.

“Los emprendedores y empresas deben reforzar sus esfuerzos en marketing digital para lograr la visibilidad que persiguen con su presencia en la red. No debemos olvidar que el principal objetivo del marketing digital no es otro que encontrar a nuestros potenciales clientes entre todos los millones de usuarios de Internet y también que nuestro público objetivo nos encuentre a nosotros cuando está buscando los productos y servicios que ofrecemos en un motor de búsqueda”.

Y es esta necesidad de ser encontrados por nuestros clientes lo que marca la diferencia, entre una web que es rentable y una pérdida de tiempo y dinero. Para entender lo que supone invertir en posicionamiento en Google, hay que tener en cuenta una serie de datos a nivel mundial: en esta web, se hacen el 70% de las búsquedas de todo el mundo, alrededor de 3.000 millones al día. El potencial de esta cantidad de usuarios, o clientes para una empresa, es inmenso. Sin embargo, hay que invertir en SEO para gestionarlo, porque no todas las páginas reciben la misma atención.

Los datos apuntan a que el 75% de los usuarios que hacen una búsqueda en Google no pasan a la segunda página. De hecho, el 22% de los clics se los lleva el primer enlace que se muestra. Esto ejemplifica la eficacia de posicionarse correctamente en los buscadores puesto que, de no ser así, una página web puede ser totalmente invisible, con la pérdida de dinero que esto supone.

Por el contrario, una apuesta por una inversión en SEO puede ser muy rentable según los datos. El ROI de este tipo de marketing arroja unas cifras muy positivas: por cada dólar invertido se puede esperar recuperar $22,24. El más alto de los canales digitales por detrás del email. Sin embargo, este último es una técnica más incómoda para el usuario. Mientras que el SEO utiliza un canal al que el usuario acude para encontrar respuestas (por lo que la empresa se convierte en algo útil para sus clientes); en el caso del e-mail es la empresa la que acude a sus clientes para enviar el mensaje. Mientras que con uno es el propio interesado el que busca a la empresa; en el otro caso, es esta la que se dirige a un público que puede precisar de sus servicios o no hacerlo.

Factores que influyen en las búsquedas
Hay múltiples factores que son determinantes para Google a la hora de colocar una web en un determinado puesto. Podemos encontrarlos en el propio texto como puede ser el contenido. Las páginas web que centran su mensaje en una palabra o una serie de palabras claves tienen más posibilidades de ser mejor posicionadas. Pero hay otros factores que no dependen de la propia estructura de la web, sino que vienen determinados por la acción de los buscadores.

Por ejemplo, Google colocará por encima a una marca conocida de otra que no tiene un determinado prestigio. Y también la localización del usuario se convierte en un punto importante para que Google determine su posición. De esta manera, a un usuario que hace una búsqueda desde España no le aparecerán páginas con contenido creado en Estados Unidos.

Fuente: Burgos Conecta